El Ayuntamiento de Antequera dedica al área de la Mujer un presupuesto total de 120.000 euros durante el presente ejercicio, que se dedican a la realización de actividades, gastos de funcionamiento y el desarrollo de los objetivos del Centro de Información a la Mujer (CIM), tanto en lo que respecta al ámbito informativo como al jurídico. Precisamente hoy se ha llevado a cabo en el patio del Ayuntamiento una concentración con motivo del Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, en la que ha participado un centenar de personas.
Han estado presentes el alcalde de la ciudad, Ricardo Millán, la concejala de la Mujer, Isabel Rodríguez Galán, el diputado Miguel Ángel Heredia, la parlamentaria andaluza Isabel Muñoz y representantes de diversos colectivos.
Congregados en torno a las 61 velas (56 rojas por las mujeres y cinco por los niños), que testimoniaban la existencia de 61 víctimas mortales de la violencia doméstica en lo que va de año en España, los participantes en la concentración han escuchado el manifiesto leído por el alcalde y, posteriormente, los nombres de dichas víctimas. Para finalizar se han guardado dos minutos de silencio y se recitó un poema. Una pancarta, tras la que se situaban las autoridades, entre otras personas, alertaba sobre que «El silencio nos hace cómplices».
El manifiesto decía que «la violencia de género constituye una violación de los derechos humanos y de las libertades fundamentales. En este sentido, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó, en 1993, la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, recomendando la aplicación de disposiciones que contribuyan a su erradicación y a paliar las consecuencias que se derivan de ella».
En los últimos años ha habido «logros sin precedentes en los derechos humanos de las mujeres, que han supuesto un importante avance en el conocimiento de su situación y que han dado lugar a la elaboración de estrategias para prevenir e incidir sobre cualquier tipo de discriminación. Conseguida la tan esperada Ley Integral contra la Violencia de Género y una vez que se ha logrado desterrar el viejo concepto de contemplar los malos tratos en el hogar como un problema de la esfera privada, son muchos aún los pasos que quedan por dar en este arduo camino para conseguir una sociedad igualitaria. Una sociedad donde no se produzcan este tipo de ataques que en los últimos años ha cobrado mayor presencia mediática, pero que devienen de una estructuración social desequilibrada, donde las mujeres son discriminadas en las esferas política, económica, laboral y social».
La necesaria sensibilización, además de una decidida voluntad política, requiere «generar un estado de opinión que rechace de forma abierta cualquier tipo de agresión tanto física como psicológica contra la identidad de las mujeres (violaciones masivas de mujeres en zonas de conflicto, explotación sexual, muertes a domicilio por la violencia doméstica, violencia económica, fundamentalismos basados en una organización patriarcal y el incumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio que abocan a las mujeres una muerte segura al negarles sus derechos, entre otros). En este sentido insistimos en la necesidad de medidas que desde el ámbito educativo encaminen a un cambio de mentalidad que ayude a eliminar las desigualdades que están en la base de la violencia de género».
El texto añadía que «por ello, y para que esta protesta contra esta práctica que atenta contra la identidad de las mujeres no se circunscriba a una mera cita en el calendario con motivo del Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, queremos desde el Excmo. Ayuntamiento de Antequera y todos y todas los aquí presentes dejar constancia de nuestro compromiso en la lucha contra la violencia de género. Ofrecemos nuestro apoyo a las mujeres víctimas de esta violencia y por supuesto nuestra colaboración y esfuerzo para poner fin a los abusos, agresiones y asesinatos que cada día nos impiden una convivencia pacífica y en igualdad. Igualmente, queremos transmitir un mensaje especial a todas las mujeres y hombres que procedentes de otros países o culturas conviven en nuestra tierra: nada, ni la costumbre, ni la religión, ni las tradiciones van a justificar agresión alguna a las mujeres. Los derechos de las mujeres son parte inseparable, integral e inalienable de los derechos universales».
Por último, se señalaba que «las instituciones públicas y privadas, las organizaciones, los medios de comunicación y ciudadanía en general debemos trabajar por conseguir una sociedad más igualitaria, más justa, que avance en la erradicación contra las mujeres: tolerancia cero a la violencia de género».