El Gobierno consensúa con los empresarios el desplazamiento de los puestos en dos años. Y demolerá otros edificios para recuperar las playas.
Se podrá seguir comiendo junto al mar, pero un poco más lejos del agua, a no ser que el cambio climático haga de las suyas. La Dirección General de Costas alejará 300 chiringuitos de la orilla en los próximos dos años. Hay 400 en la provincia.
La medida, que está consensuándose con los empresarios, afectará a todas las instalaciones dentro del dominio público marítimo terrestre (delimitado por el Gobierno con una línea imaginaria y de distancia variable respecto a la orilla).
Los nuevos chiringuitos de las playas de poniente de la capital no tendrán que desplazarse, ya que sí cumplen la normativa vigente, según la Demarcación de Costas de Andalucía en Málaga.
Por su parte, la Asociación Provincial de Empresarios de Playa cree que serán algo más de 200 los afectados. Las instalaciones que se moverán son las autorizadas temporalmente, no las que tengan concesiones (edificios de obra adosados a los paseos).
«Los chiringuitos no se sacarán de la arena. Se les buscará algún hueco fuera del dominio público; tres, cinco o 10 metros más allá», recalcó ayer el presidente del colectivo, Miguel Arrabal.
via 20minutos